ERRADICANDO EL ACOSO LABORAL: EL PODER DEL PROTOCOLO EN EL MUNDO EMPRESARIAL
¿QUE ES EL PROTOCOLO DE ACOSO LABORAL?
El Protocolo de Acoso Laboral establece los procedimientos a seguir ante casos de acoso en el entorno laboral. Es un documento que identifica a los responsables de la prevención y gestión del acoso, define claramente las conductas constitutivas de acoso, establece los canales de comunicación para denunciar casos de acoso, así como las medidas disciplinarias aplicables y el apoyo a las víctimas.
Es esencial que las empresas adapten este protocolo a sus necesidades específicas, considerando sus características y particularidades. Además, la formación adecuada del personal para la aplicación efectiva del protocolo es fundamental.
Es importante destacar que la existencia de un Protocolo de Acoso Laboral no solo es una cuestión legal, sino que también refleja el compromiso de la empresa con la prevención y erradicación del acoso en el lugar de trabajo. Promover una cultura organizacional que fomente el respeto, la igualdad y la tolerancia es fundamental para crear un ambiente laboral saludable y productivo.
Si formas parte del personal de la Generalitat de Catalunya y has experimentado una situación potencial de acoso sexual o discriminación basada en el sexo, orientación sexual, identidad de género o expresión de género, te animamos a que hagas uso de este protocolo. Puedes poner en conocimiento la situación y contar con el acompañamiento y la reparación adecuada.
¿TODAS LA EMPRESAS ESTAN OBLIGADAS?
Todas las empresas deben contar con un protocolo contra el acoso sexual, independientemente de su número de empleados. Sin embargo, aquellas con más de 50 empleados también están obligadas a registrar este protocolo en su plan de igualdad.
En conclusión, el Protocolo de Acoso Laboral es una herramienta indispensable en la lucha contra el acoso en el ámbito laboral. Su implementación y actualización constante son fundamentales para cumplir con las disposiciones legales vigentes y promover un entorno de trabajo seguro y respetuoso. Todas las empresas, independientemente de su tamaño, deben contar con un protocolo de este tipo como parte de su compromiso con la prevención del acoso y la protección de sus empleados.
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